Dedico este momento a los misioneros sin causa, a los cerebrines y a vuestra vecina del quinto. Ante el deseo de mi muerte, post tras post, he recapacitado. No puedo alimentarme del sufrimiento de la gente, no debo ser cruel, debo llegar a ser ¡un grandísimo hijo de puta! Quiero verte ahí tirada, quiero verte destrozada.
Habéis abierto mis ojos, mis queridas politoxicomanas. Me esforzaré en saciar vuestras ansias de sangre, que en el fondo tenéis, y machacar a quien me salga del coño. La sangre es vida, vida, vida mía. ¡Me pongo cachondo solo de pensarlo!
Os amo, desde lo más profundo.
PSD: Podríais hacer un club de fans. ¡ESFORZAOS!
1 comentario:
McLamala, ¿Qué te parece el síndrome de hijoputed y subnormalidad de la pareja urbanita de pekin express? ay, esas Meritxel y Alazne como las pierde la boca...pero me encantan. Habrá agresiones. Please dedica una actualización
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